lunes, 12 de septiembre de 2011

I wish I knew you before

Últimamente, el modo aleatorio del programa de reproducción de música de mi ordenador acude con una frecuencia inusitada a la voz de Amy Macdonald y a una canción en particular que siempre me deja las mismas palabras en la memoria: “I wish I knew you before”, o lo que es lo mismo, ojalá te hubiera conocido antes.
Quizá sea la repetición casual, o simplemente el momento adecuado, la evolución de la personalidad y las esperanzas, los deseos, pero me resulta inevitable reflexionar al respecto de esta idea.
Todos hemos escuchado estas palabras alguna vez, ya sea en películas, a través de nuestra propia voz o la de otros acariciando nuestros tímpanos. Hemos deseado o hemos visto desear que la felicidad actual hubiera comenzado anteriormente, con la esperanza de que esta se prolongaría hasta la más reciente de las respiraciones palpables. Nos ciega la alegría, la risa, el amor o la diversión infinita, y soñamos nuestra vida espolvoreada de estos inolvidables momentos. El pasado es oscuro a la luz de un beso, de la amistad, del calor en cualquiera de sus modalidades.
Es comprensible esta sensación, atribuir a las nuevas buenas personas el poder mágico de despoblar de malas hierbas el día a día, transformándose en el antídoto perfecto para cualquier sufrimiento. Sin embargo, es otro el problema que me atañe. Claro que al descubrir el amor comulgo con todos en el dulce sentimiento de extender el bienestar hacia el pasado, pero ¿cuántas veces en la soledad o siendo espectadores del inevitable comienzo de las penurias pensamos: ojalá hubieras aparecido más tarde, no ahora que soy simple, hosco o indolente, sino cuando el mal apacible de los días, del paso del tiempo, me haga más completo, menos baldío, capaz de llenar mis lagunas o de capear con las tuyas?
Pero claro, no puedo ser tan inocente, pues, ¿acaso habría aprendido algo de no haber sufrido y hecho sufrir, de no haber poblado los márgenes del calendario de álbumes de fotos aleatoriamente repartidos entre los días negros del olvido y los días rojos del rencor?

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